MIKEL LÓPEZ SÁEZ DE ASTEASU: “EL EJERCICIO FÍSICO SE DEBE PRESCRIBIR DE FORMA INDIVIDUALIZADA”
Mikel López Sáez de Asteasu, profesor en la Universidad Pública de Navarra, investigador posdoctoral en el grupo de Ejercicio Físico, Salud y Calidad de vida (E-Fit) de Navarraviomed. Centro de Investigación Biomédica de Pamplona, participa en el 64 congreso de la SEGG para recomendar las últimas tendencias en fisioterapia que pasan por “prescribir a cada persona su dosis adecuada de ejercicio para optimizar los beneficios obtenidos” y utilizar las nuevas tecnologías de la forma más eficaz.
-Su ponencia aborda las “Evidencias en ejercicio físico y cáncer” ¿Qué es lo más importante que quiere transmitir a los participantes interesados en este tema?
La idea principal que quiero transmitir a la audiencia es la importancia de la prescripción de ejercicio físico como parte del tratamiento en personas mayores con cáncer. El ejercicio físico es una estrategia terapéutica eficaz para revertir las consecuencias negativas que produce el tratamiento farmacológico que frecuentemente reciben estos pacientes. El músculo es un órgano endocrino que va a producir beneficios multisistémicos en las personas mayores con cáncer cuando se ejercita. La evidencia cada vez es más consistente respecto a la eficacia del ejercicio físico en esta población. Por lo tanto, el ejercicio físico va a tener un rol importante en el cuidado de la población mayor con cáncer, y la ponencia se va a centrar en los últimos hallazgos investigados respecto a este tema.
-¿En qué investigación o práctica trabaja en este momento?
Tenemos varios ensayos clínicos centrados en la prescripción de ejercicio físico en población mayor con cáncer. Por un lado, estamos desarrollando un programa de ejercicio multicomponente a modo de prehabilitación en personas adultas con cáncer de esófago que posteriormente van a ser intervenidos quirúrgicamente. Por otro lado, el Servicio de Geriatría del Hospital Universitario de Navarra junto con el Servicio de Oncología han desarrollado un programa de ejercicio físico intrahospitalario para tratar de revertir la discapacidad iatrogénica asociada a la hospitalización en personas mayores con cáncer. Así mismo, también se realizó una intervención de ejercicio físico en el Centro de Investigación Biomédica Navarrabiomed en aquellas personas mayores con cáncer de pulmón que viven en la comunidad.
Actualmente, participo en otras líneas de investigación centradas en los efectos del ejercicio físico en población con deterioro cognitivo y demencia y con trastornos mentales graves.
-¿Qué recomendaciones específicas pueden darse para Personas Mayores desde la fisioterapia?
El ejercicio físico tiene que formar parte del envejecimiento saludable. La Organización Mundial de la Salud ha destacado la actividad física y la práctica de ejercicio físico como hábitos de vida saludables para garantizar la autonomía de las personas mayores y mejorar la calidad de vida relacionada con la salud. El ejercicio físico, al igual que otros tratamientos médicos, debe ser prescrito de forma individualizada en base a las características funcionales de las personas. Por ello, programas de ejercicio físico como el programa VIVIFRAIL, han tenido tanto éxito en la última década y la evidencia es cada vez más consistente respecto a los beneficios de este tipo de programas de ejercicio físico. El reto es el siguiente: tratar de prescribir a cada persona su dosis adecuada de ejercicio para optimizar los beneficios obtenidos.
-¿Cuáles son las principales tendencias en este momento en esta disciplina?
Como comentaba anteriormente, vivimos en la era de la medicina precisión, por lo tanto, el ejercicio debe ser prescrito como tal. Al igual que otros tratamientos son cuidadosamente prescritos en base a la patología o las comorbilidades que presenta la persona mayor, el ejercicio físico tiene que ser pautado en base a la capacidad funcional de la persona. Existe evidencia robusta en relación a la efectividad del ejercicio físico en diferentes poblaciones mayores con cáncer, por lo tanto, el ejercicio físico tiene que formar parte del arsenal terapéutico a disposición del profesional de la salud, pero tiene que ser prescrito de forma correcta e individualizada.
-¿Cómo se va incorporando la tecnología? ¿Las Personas Mayores la asumen bien?
A día de hoy, es el principal reto de nuestra sociedad. Los avances en tecnología han sido formidables en las últimas décadas, y ahora se trata de buscar las estrategias y las herramientas efectivas para mejorar la salud de los mayores. Considero que se están produciendo grandes avances en este ámbito, pero todavía queda mucho camino por recorrer, lo cual es algo muy interesante en la investigación. El siguiente paso es tratar de examinar, por un lado, la usabilidad de la tecnología para mejorar la salud de las personas mayores, y, por otro lado, determinar la eficacia de estas tecnologías a la hora de mejorar el cuidado de nuestros mayores y obtener beneficios relacionados con la salud.