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La diabetes puede ser el origen de una disfunción sexual
La diabetes provoca una serie de daños en nervios y vasos sanguíneos que pueden ser el origen de una disfunción sexual. Así lo ha advertido la Sociedad Española de Diabetes (SED) con motivo de la celebración del Día Europeo de la Salud Sexual (14 de febrero). De hecho, según se ha podido comprobar, más del 50 por ciento de los hombre y el 25 por ciento de las mujeres con diabetes experimentarán algún tipo de disfunción sexual a lo largo de su vida, problema que, aunque no se considera un trastorno grave, sí puede reducir la calidad de vida de la persona con diabetes.
Las disfunciones más comunes
Entre los hombres con diabetes el problema sexual más común es la disfunción eréctil, de hecho su prevalencia es tres veces mayor que en hombres no diabéticos; además, a partir de los 60 años, más de la mitad de los varones con esta patología tiene algún problema de erección. Las posibilidades de sufrirlo aumentan con la edad, pero también debido a un mal control de la glucemia, a la duración de la diabetes, y al padecer otras complicaciones, como la neuropatía o la retinopatía diabética.
En el caso de las mujeres con diabetes lo que suele experimentar es pérdida de deseo sexual y excitación, disminución de la sensibilidad en la zona genital, falta de lubricación que conlleva dispareunia (dolor en las relaciones sexuales) y dificultad para alcanzar el orgasmo.
Habla con tu médico
La Dra. Sonia Gaztambide, presidente de la SED, recuerda que es muy importante que “los pacientes soliciten ayuda y comenten su problema al personal médico. Además deben seguir una alimentación equilibrada, un buen control glucémico, que aumenten la actividad física, reduzcan el sobrepeso y eviten el consumo de alcohol y tabaco. A su vez, el apoyo psicológico, sobre todo en las mujeres, es fundamental para tratar la disfunción sexual”.
Las disfunciones más comunes
Entre los hombres con diabetes el problema sexual más común es la disfunción eréctil, de hecho su prevalencia es tres veces mayor que en hombres no diabéticos; además, a partir de los 60 años, más de la mitad de los varones con esta patología tiene algún problema de erección. Las posibilidades de sufrirlo aumentan con la edad, pero también debido a un mal control de la glucemia, a la duración de la diabetes, y al padecer otras complicaciones, como la neuropatía o la retinopatía diabética.
En el caso de las mujeres con diabetes lo que suele experimentar es pérdida de deseo sexual y excitación, disminución de la sensibilidad en la zona genital, falta de lubricación que conlleva dispareunia (dolor en las relaciones sexuales) y dificultad para alcanzar el orgasmo.
Habla con tu médico
La Dra. Sonia Gaztambide, presidente de la SED, recuerda que es muy importante que “los pacientes soliciten ayuda y comenten su problema al personal médico. Además deben seguir una alimentación equilibrada, un buen control glucémico, que aumenten la actividad física, reduzcan el sobrepeso y eviten el consumo de alcohol y tabaco. A su vez, el apoyo psicológico, sobre todo en las mujeres, es fundamental para tratar la disfunción sexual”.
