El 89% de los cuidadores en España son mujeres y en el 47% de los casos, el cuidador principal es un familiar.
Al acto han acudido el Dr. José Antonio López Trigo, presidente de la SEGG; D. César Antón Beltrán, director general del IMSERSO; Dña. M.ª Ángeles García Antón, secretaria de la Fundación Envejecimiento y Salud de la SEGG; Dª. Manuela Cabero Morán vicepresidenta Nacional de Cruz Roja; Dr. Primitivo Ramos Cordero, secretario de la SEGG; Dr. Iñaki Artaza Artabe, presidente de la Fundación Envejecimiento y Salud de la SEGG; y D. José Manuel Martín Martín, responsable de Comunicación de Procter & Gamble (Lindor).
¿Cuál es el perfil del cuidador en España? ¿Cuánto tiempo dedican a cuidar? ¿Cómo afecta al cuidador física y mentalmente la labor que lleva a cabo? ¿Qué carencias y necesidades tiene el cuidador? El estudio CuidadorES de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología y Lindor, responde a estas preguntas y otras muchas, ya que refleja el estado actual de los mismos. Este estudio se ha basado en una encuesta online realizada a cuidadores a nivel nacional, en todas las comunidades autónomas, llegando a una muestra total significativa de 820 cuidadores. Tiene un nivel de confianza del 95% y un error muestral del 0’3 %.
Los cuidadores tienen una importante carga física, psíquica y emocional, ya que el 84% de los mayores dependientes precisa de ayuda para su higiene; 8 de cada 10 para el vestido; 7 de cada 10 para realizar la limpieza del hogar. El 63% precisa ayuda para preparar comida y el 58% para alimentarse. Además, 6 de cada 10 necesita ayuda para gestiones administrativas.
No sólo los mayores dependientes necesitan ayuda en el día a día de sus tareas ordinarias, sino que dentro del ámbito sanitario también hay un alto grado de dependencia, el 85% requiere de ayuda a la hora de tomar medicamentos adecuadamente; el 62% estimulación cognitiva y casi 6 de cada 10 tiene incontinencia urinaria o fecal. Además, el 54% necesita algún tipo de cura y 5 de cada 10 precisa rehabilitación.
En numerosas ocasiones, el mayor no puede agradecer y reconocer la labor del cuidador, a pesar de que a estos les resultaría reconfortante y alentador. Esto es debido a que 5 de cada 10 mayores dependientes padecen demencia; el 19% tiene una actitud agresiva y de menosprecio, y un 15% tiene un sentimiento de rechazo.
Este estudio refleja claramente el grado de dependencia en las tareas diarias y en el ámbito sanitario, pero además, uno de los datos más reveladores, es el grado de dependencia en el ámbito emocional. Un 90% necesita apoyo afectivo-emocional y un 76% depende de otras personas para entretenerse.
Y … ¿cómo afecta al cuidador física y mentalmente la labor que lleva a cabo? Observamos que más de la mitad de los cuidadores (54%) afirman que les ha supuesto cambios en sus vidas, imprimiéndoles alteraciones en su carácter y en su estado de ánimo. Al final, el tiempo libre de los cuidadores se ve afectado en un 82% y la vida familiar en un 70%, dos datos que repercuten de manera directa en el estilo de vida de los cuidadores.
Todo esto junto al grado de compromiso, hace que casi a un 60% les afecte a su estado de salud: 8 de cada 10 nota cansancio o fatiga y se encuentra estresado. El 76% presenta dolores osteoarticulares y dolor de espalda: 5 de cada 10 sufre insomnio y casi un 40% presenta dolores de cabeza.
Si profundizamos, observaremos que los principales problemas de salud mental o síntomas a nivel psicoafectivo afectan a un 49% de los cuidadores. Estos son la frustración e impotencia 73%; la ansiedad, irritabilidad o enfado 61%; la depresión o tristeza 57%; la soledad 35% y el sentimiento de culpa 30%.
Pero realmente, ¿qué carencias y necesidades tiene el cuidador? Resulta llamativo ver que a un 60% de los cuidadores les gustaría disponer de tiempo para cuidarse, a un 56% les gustaría realizar ejercicios y técnicas de relajación y un 55% les gustaría saber decir NO ante demasiadas demandas.
Del mismo modo cuando se pregunta a los cuidadores acerca de las principales necesidades que tienen, subrayan el apoyo y el reconocimiento social (51%); la necesidad de ayuda económica (45%) y el apoyo psicológico y emocional (41%).
Por este motivo, la SEGG y Lindor quieren poner de relieve y mostrar el valor de los cuidadores, que se iniciaron en los cuidados de un familiar o persona próxima y que día a día, van desarrollándose y adquiriendo un rol más profesional. Porque “Detrás de una persona mayor dependiente siempre hay un cuidador”