El zumo de granada tiene un contenido muy alo en punicalaginas, un potente antioxidante que, según un reciente estudio, puede beneficiar especialmente a los hombres que padecen cáncer de próstata...
Parece ser que la falta de sueño conlleva el aumento de una hormona que incrementa las ganas de comer, sobre todo alimentos ricos en grasas y azúcares...
El catarro o resfriado común es una de las enfermedades más frecuentes en nuestro entorno. Aunque la mayoría de los catarros son leves y se resuelven en un periodo corto de tiempo, representan una de las causas principales de consultas médicas, según informa la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG).
Más del 80% de la población española consume más sal de la recomendada. El consumo medio de sal por persona en España es de 9,9 gramos al día, lo que supone casi el doble de lo que recomienda la OMS
Por suerte, vamos avanzando en cuanto a conocimiento sobre esta enfermedad, que produce un endurecimiento progresivo de las arterias, provocada sobre todo por el aumento de los niveles de colesterol en sangre.
Con la edad, el riesgo de caídas aumenta, nuestros reflejos ya no son lo que eran y nos movemos más lentamente. Al hecho de envejecer, se unen una serie de enfermedades prevalentes como el Parkinson, las demencias, la artrosis, los problemas visuales o auditivos, aumentando el riesgo considerablemente. Pero, además de estos problemas físicos que llegan con los años, hay que añadir las barreras arquitectónicas que tienen que superar a diario los ancianos discapacitados
Científicos de la Universidad de Jaén han descubierto que el aceite de oliva virgen extra, así como el aceite de oliva “ecológico”, son más eficaces para prevenir infecciones como las causadas por las bacterias E.coli o la salmonella con más efectividad que el aceite de pescado, al que se le atribuyen cualidades antiinflamatorias y cardiosaludables por su alto contenido en omega 3.
Más de la mitad de las personas mayores de 65 años con incontinencia urinaria padece insomnio, según un estudio del Instituto de Investigaciones del Sueño y Lindor Ausonia. Esta dificultad para descansar es uno de los factores que más alteran la calidad de vida de estas personas.